Su Majestad la Reina Doña Sofía visitó las instalaciones del Banco de Alimentos de Guadalajara, ubicado en el polígono industrial del Henares, en un acto que reafirma su compromiso con las causas solidarias y su cercanía con las organizaciones que luchan contra la pobreza y la exclusión social. Esta visita, que marcó la número 50 de las 54 asociaciones de bancos de alimentos en España que ha recorrido, no solo destacó la labor esencial de esta entidad, sino también el papel activo de la Reina emérita como presidenta ejecutiva de la Fundación Reina Sofía, una institución dedicada a promover iniciativas sociales y humanitarias.
La jornada comenzó a las 12:30 horas, cuando Doña Sofía llegó puntual al macrosilo del Banco de Alimentos. Acompañada por la alcaldesa de Guadalajara, Ana Guarinos, la presidenta del Banco de Alimentos, Carmen Hombrados, y representantes de la Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL), la Reina fue recibida en un ambiente cálido y distendido. También estuvieron presentes autoridades locales y regionales, como el presidente de la Diputación Provincial, José Luis Vega, la consejera de Igualdad, Sara Simón, y la concejala de Asuntos Sociales, Eva Henche, entre otros. Este encuentro, cerrado a los medios para fomentar un diálogo más personal, permitió a Doña Sofía conocer de primera mano el funcionamiento de la organización y las necesidades de las personas a las que atiende.
El Banco de Alimentos de Guadalajara, fundado el 21 de noviembre de 2001, es una organización no gubernamental sin ánimo de lucro que opera gracias al trabajo incansable de sus voluntarios. En 2024, atendió a casi 26.000 personas, incluyendo 5.000 menores y más de 1.000 lactantes, distribuyendo más de 184.000 kilos de alimentos a través de 40 entidades. Su labor incluye la gestión de excedentes alimenticios, que se recogen, almacenan y distribuyen a centros asistenciales para llegar a las familias más vulnerables. Además, colabora estrechamente con los Servicios Sociales para responder a emergencias, como lo demostró recientemente al proporcionar comida y bebida a pasajeros de dos trenes AVE evacuados tras un apagón, algunos de los cuales pasaron la noche en el Palacio Multiusos de Guadalajara.
Durante la visita, que se prolongó por más de una hora, la Reina Sofía recorrió las instalaciones, mostrando un interés genuino por los productos almacenados, el antiguo silo y las operaciones diarias del banco. Carmen Hombrados destacó ante los medios el excelente funcionamiento de la entidad y la importancia del apoyo de la Fundación Reina Sofía, que recientemente destinó 500.000 euros para adquirir leche destinada a todos los bancos de alimentos del país. En el caso de Guadalajara, se espera la llegada de 13 palés de leche que se distribuirán también a parroquias y familias necesitadas. Además, Hombrados aprovechó la presencia de Doña Sofía para solicitar ayuda con una necesidad concreta: el arreglo del aire acondicionado de la furgoneta de la organización, un gasto estimado entre 2.500 y 3.000 euros. La Reina, en un gesto de compromiso inmediato, se comprometió a cubrir este coste a través de su fundación, demostrando su disposición a atender necesidades prácticas y urgentes.

El acto también tuvo momentos simbólicos. Doña Sofía firmó en el libro de honor de la asociación y obsequió a las autoridades con un abanico y un bolígrafo de la Fundación Reina Sofía. Por su parte, la alcaldesa Ana Guarinos le entregó una placa conmemorativa de cristal que incluía una fotografía de su primera visita oficial a Guadalajara como Reina de España, el 20 de abril de 1978, cuando, junto al Rey Juan Carlos, inauguró las 744 viviendas sociales conocidas como las Casas del Rey. Este regalo evocó la larga relación de la Reina emérita con la ciudad, que se ha fortalecido con visitas posteriores, como su asistencia en 2006 a un concierto benéfico en el Teatro Buero Vallejo a favor de la Fundación Apadrina un Árbol, o su presencia privada el 21 de diciembre de 2024 en un partido de balonmano en el pabellón David Santamaría, donde jugaba su nieto Pablo, miembro del BM Granollers.
La labor de la Reina Sofía trasciende este acto concreto. A sus 86 años, su dedicación a causas sociales sigue siendo un pilar de su legado. A través de la Fundación Reina Sofía, ha impulsado proyectos que abordan desde la lucha contra la pobreza hasta la sostenibilidad y la asistencia a colectivos vulnerables. Su implicación con los bancos de alimentos refleja un compromiso personal con la dignidad de las personas, promoviendo la solidaridad en un contexto de crecientes desafíos económicos y sociales. Esta visita, que había sido pospuesta en varias ocasiones —incluyendo un intento fallido el 20 de enero de 2025—, fue descrita por Hombrados como un hito para la organización, que espera que el respaldo de la Reina visibilice su labor y evite recortes en el apoyo institucional.
Tras la visita, Doña Sofía se trasladó al restaurante Botánico, en el paseo de San Roque, donde compartió un almuerzo con empresarios locales. El menú, sencillo y saludable, incluyó aperitivos ligeros, una parrillada de verduras, lenguado a la plancha y una bolita de helado, reflejo de su conocida moderación. Los comensales, impresionados por su cercanía, la despidieron con un aplauso espontáneo, mientras ella, con su característica elegancia, se hizo fotos con los empleados y clientes antes de partir bajo la lluvia.

La visita de la Reina Sofía al Banco de Alimentos de Guadalajara no solo puso en valor el trabajo de una entidad que es un salvavidas para miles de personas, sino que también reafirmó su papel como una figura de referencia en la acción social. Su capacidad para conectar con las necesidades reales de las comunidades, su discreción y su constancia son un testimonio de un compromiso que, lejos de desvanecerse, se renueva con cada gesto. En un mundo donde la solidaridad es más necesaria que nunca, la labor de Doña Sofía sigue siendo un faro de esperanza y un ejemplo de servicio público

