El Rey Felipe VI ha concedido la Insigne Orden del Toisón de Oro a Felipe González, Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, y Miquel Roca i Junyent, en un acto que reivindica la vigencia de la Constitución española y la Transición democrática, coincidiendo con el 50º aniversario del regreso de la Monarquía a España. Este gesto pone en valor el papel fundamental que jugaron los padres de la Constitución en la consolidación de las libertades y el consenso político, en un momento marcado por la inestabilidad y la polarización.
La Orden del Toisón de Oro es una de las distinciones más prestigiosas que puede otorgar la Corona española. Fue fundada en 1430 por Felipe III “el Bueno”, Duque de Borgoña, como una orden de caballería para agrupar a caballeros fieles y valientes, imbuida de símbolos que remiten a la historia y la mitología, como el vellocino de oro. Esta orden personal, no hereditaria, ha honrado a lo largo de los siglos a la realeza, jefes de Estado y a personalidades destacadas del ámbito político, cultural y social.
Desde su coronación, Felipe VI había concedido esta distinción únicamente a miembros de su familia: en 2015 a su hija, la Princesa Leonor, y en 2024 a su madre, la Reina Sofía, momentos significativos para la continuidad dinástica y el reconocimiento a su dedicación.
La concesión a Felipe González, Miguel Herrero y Miquel Roca es una extensión de esta tradición, abriendo el círculo de galardonados con esta máxima distinción a figuras políticas y constitucionalistas, conforme a la historia de la orden, que ha reconocido a líderes y figuras de máximo relieve en España y Europa.
Felipe González, expresidente del Gobierno, fue una figura clave en la consolidación del Estado democrático tras la dictadura franquista. Al frente del PSOE, lideró una modernización profunda del país, manteniendo la estabilidad institucional y renovando la vida política española durante varias legislaturas.
Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón y Miquel Roca i Junyent son dos de los siete padres de la Constitución española que aún viven. Ambos tuvieron un papel fundamental en la redacción y negociación del texto constitucional que estableció las bases de la España democrática y plural. Herrero, vinculado a la UCD, aportó una visión jurídica y técnica fundamental, mientras que Roca, desde Convergència i Unió, representó la voluntad de consenso y el reconocimiento de la diversidad territorial.
Su legado de diálogo, pacto y responsabilidad política sigue siendo un referente para preservar la convivencia y proteger el consenso constitucional.
Este reconocimiento se produce en un momento en que la Constitución de 1978 está siendo objeto de debates y cuestionamientos. La entrega del Toisón de Oro a estas figuras emblemáticas refuerza el valor del consenso y la concordia como principios fundamentales para la estabilidad política y social.
Además, coincide con el 50º aniversario de la coronación de Juan Carlos I, momento simbólico que marca el inicio de la transición política en España. Así, Felipe VI reafirma la continuidad histórica y el compromiso con los valores que permitieron superar décadas de división y abrir un camino de libertades.
La concesión de esta distinción honra no solo a los individuos galardonados sino también al proyecto democrático español y a la Monarquía como institución garante de la unidad y estabilidad del Estado. La Orden del Toisón de Oro simboliza la alianza entre la Corona y la sociedad, una alianza que se fundamenta en el servicio público, la excelencia y el respeto a la ley.
En suma, el reconocimiento a los padres de la Constitución con esta máxima distinción es un llamamiento a mantener vivo el legado de la paz, el diálogo y el compromiso que constituyen la esencia del país contemporáneo, custodiado por la Monarquía y por todos los españoles.

