No es la primera vez que podemos ver juntos a Su Majestad el Rey Felipe VI y a su Padre el Rey Juan Carlos. La última, en la conmemoración de la entrada de España en la Unión Europea. En esta ocasión, los dos Reyes han viajado hasta Roma para asistir a la clausura del X simposio de COTEC.

La Fundación Cotec, nació a iniciativa del Rey Don Juan Carlos en 1990, a la que se unieron Italia y Portugal en 2002 y 2003 respectivamente. Tiene como misión, contribuir al desarrollo de España fomentando la innovación tecnológica de la empresas y la sociedad, además de sensibilizar a ambas ante el impacto de cambios técnicos, que ayuden a llevar la tecnología desde los sectores de la investigación y la universidad a la industria. Los trabajos que lleva ahora, están encaminados a la reindustrialización de los tres países, para promover el crecimiento económico.

Los Presidentes de Portugal e Italia, han acompañan a los Reyes, que han mantenido un encuentro con el Consejo Nacional de Investigaciones previo a la clausura.

  

Inició el Rey su discurso, recordando que la Fundación Cotec, nació inspirada por el Rey Juan Carlos, a la que se unieron posteriormente Italia y Portugal, para proseguir indicando, que las sociedades deben adaptarse, con la mayor anticipación posible, a la nueva innovación. Mas colaborativa, más social y abierta, alineada, dijo Don Felipe, al estilo de vida propio de Europa del Sur.

Don Felipe lanzó el ambicioso reto, de ser líderes en un modelo de innovación más humanista, que recuerda a otro periodo de cambios profundos, el Renacimiento, que reivindicaba un futuro mejor, más diverso y libre, y que acabó influyendo en Europa. Recordó, que Italia, Portugal y España, son grandes naciones, admiradas en el mundo entero por su aportación a la Historia y la cultura, la lengua, el arte, la literatura, descubrimientos geográficos, y durante muchos siglos, referentes de ciencia y tecnología.

El Rey hizo mención al gran talento y capacidades tecnológicas de primer nivel que hay en el Reino de España, Italia y Portugal, pero que no hemos logrado dar el salgo de lo individual a lo colectivo. Don Felipe insistió en que «hemos de esforzarnos porque nuestras sociedades conozcan y reconozcan estas capacidades y asimilen la innovación como un atributo propio de nuestras culturas. La innovación entendida en sentido amplio como “todo cambio basado en el conocimiento que genera valor”.

Un cambio, no solo tecnológico, no solo científico, no solo económico, ya que, según palabras del Rey «ahí, en esa visión ampliada y humanista de la innovación, donde, señoras y señores, nos jugamos nuestro futuro y el de las generaciones venideras».

 Fotos: Casa Real