Escucharán estos días que hay un Rapero, de nombre Josep Miquel Arenas, que a indicaciones de Pablo Iglesias, a la sazón líder del partido Comunista Podemos, escribió unas «canciones» por las que ha sido condenado a tres años y medio de prisión por, y ahora viene lo curioso, según a quien pregunten hay dos versiones:

* Versión de los Comunistas de Podemos: Impunidad para los corruptos y cárcel por hacer una canción. Rapear sobre el Rey no debería ser delito

* Versión de la Audiencia Nacional, la real: «Delitos de enaltecimiento del terrorismo, calumnias e injurias graves a la Corona y amenazas por el contenido de las letras de algunas de sus canciones, en las que se refiere al Juan Carlos I y al presidente del Círculo Balear, Jorge Campos».

Esta claro, y a cualquier persona inteligente no le supondría mucho esfuerzo entenderlo, que a esta persona no se le ha condenado por escribir canciones, sino por, y según reza la sentencia de la Sección Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, en algunos de los temas comprendidos en dos discos tienen un «indudable contenido laudatorio» de ETA y GRAPO, que justifican e incitan a la reiteración de las acciones violentas. También ve un «claro menosprecio y humillación» de las víctimas del terrorismo, pidiendo incluso que vuelvan a cometer atentados y presenta a miembros de dichos grupos como «víctimas del sistema democrático».

En dicha sentencia del tribunal,subraya que las letras «van más allá de la expresión de coincidencia con objetivos políticos, solidaridad con los presos o camaradería nacida de vínculos ideológicos», sino que suponen una «alabanza» a los medios violentos empleados por los grupos terroristas. La Sala asegura que las expresiones reiteradas «exceden de la crítica política y se introducen en el campo del atentado contra la dignidad personal». Por tanto, rechaza que estas manifestaciones estén amparadas en la libertad de expresión y en la «creación artística», en referencia a que Arenas aseguró en el juicio que «todo arte es provocativo».

La condena es a dos años de prisión y ocho de inhabilitación por el delito de enaltecimiento del terrorismo y humillación a las víctimas, y de un año y seis meses de cárcel por las calumnias e injurias graves a la Corona.

En cuanto al delito de calumnias e injurias a la Corona, sostiene que letras como la titulada ‘El Rey Borbo’, vierten «afirmaciones injuriosas» contra el Rey y otros miembros de la Familia Real «directamente atentatorias contra su dignidad personal».

Afirma, igualmente, que todas las expresiones de Valtonyc sobre el Rey Juan Carlos o su familia suponen un «ataque personal gratuito a su reputación como persona», que «afectan a los aspectos íntimos de la vida privada del monarca» y de su familia. También indican que «atacan a su honorabilidad personal» y que, por tanto, no son necesarios para criticar el sistema monárquico ni para defender la República. Valtonyc reconoció durante el juicio que compuso el tema musical ‘El Rey Borbo’, a petición del líder comunista de Podemos, Pablo Iglesias, para el programa de televisión La Tuerka.

Por el delito de amenazas a Campos, la Sala enfatiza que, aunque el rapero afirmase en el juicio que no pretendía amenazar, es indiscutible que podía ignorar el contenido «intimidatorio» de sus canciones en las que, a juicio del tribunal, ocasionaban «temor o zozobra» en las personas a las que iba dirigidas

Arenas se negó pedir perdón al denunciante, el cual se encontró por las calles de su ciudad «varias veces» y le dijo que si se disculpaba públicamente acabaría con el caso.

El «angelito» Valtonyc, publicó en desde julio de 2012 y el año 2013 en Youtube, así como en otras páginas web, diversos archivos de audio y vídeos de canciones creadas por él en las que se apoya, ensalza, alaba y justifica la existencia de organizaciones como ETA y GRAPO.

En las mismas se pide que vuelvan a cometer atentados. Las letras también contienen frases en las que se manifiesta la posibilidad de atentados y secuestros contra políticos como el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, o la de Defensa, María Dolores de Cospedal.