Ni una puntada sin hilo. Su Majestad el Rey volvió a escoger entre sus corbatas la VERDE, ante los intolerantes que con su odio enfermizo y extremo, insultaron ayer al Reino de España con su infantil acto de pitar al himno y al Rey. Muchos son los que proclaman la libertad de expresión, muchos de ellos con un odio extremo a España que disfrutan de este tipo de aberraciones, mientras que otros lo hacen en una actitud cobarde de ponerse de medio lado para que no les salpique o les puedan insultar, pero que solamente demuestran su cobardía.

Durante el régimen impuesto de la II república, estaban prohibidas las manifestaciones monárquica, por lo que todos aquellos que querían demostrar su adhesión a la corona, empezó a usar prendar de color VERDE, ya que su acrómino significa Viva El Rey De España.

No es libertad de expresión insultar a todo un pueblo a través de sus símbolos, porque la Bandera, el Himno y el Jefe del Estado representan la democracia, justicia y libertad que disfrutan y de la que se aprovechan todos esos mezquinos y sinvergüenzas que se dedican a insultarnos a todos.

La izquierda española se dedicó hace muchos años a deslegitimar los símbolos de España como si no tuvieran importancia, con el objetivo de quitarle a los Españoles su orgullo de pertenencia a la Patria y su manifestación exterior. Los símbolos son tan necesarios como importantes, y su desprecio y ultraje, constituyen un acto de cobardía que debería estar moralmente penado por la sociedad.

El Rey aguanto estoicamente, como viene haciendo desde hace años, una nueva demostración de borreguismo por parte de unos cuantos intransigentes catalanes y vascos, que se adueñan de los sentimientos de toda una región, como si ellos fueran los únicos con derecho a manifestarse. Una actitud dictatorial y enfermiza, que ha sido alentada por quienes les han estado robando durante años en su propia cara, y que han enarbolado la bandera de la secesión para intentar ocultar sus corruptelas.

Y no, el Rey no debía irse como muchos han manifestado en una entendible reacción de cualquier ciudadano, porque SM el Rey mantuvo ayer la dignidad Real y la de toda España ante los borregos que demostraron su incultura democrática, su falta de educación y una intolerancia solo comparable con regímenes dictatoriales.

La Corbata verde del Rey, es un ejemplo de lo que todos debemos hacer día a día, que es no dejarnos llevar por los violentos, aquellos que pretenden dividirnos y menospreciar nuestros símbolos.