La Guardia de Corps, era uno de los antiguos regimientos que conformaban los destinados a dar custodia a la Familia Real. En concreto, ellos eran uno de los más cercanos al Rey, la Reina y toda su familia, y conformaban, junto a los Alabarderos, el cuerpo de seguridad principal de la Corona.

La Guardia de Corps estaba integrada por oficiales especialmente escogidos para prestar servicio junto al Rey, por lo que conformaban la linea de caballería de defensa de la Familia Real, ya que estaba compuesta por tropas de caballería.

Al ocupar Felipe V el trono de España, las Guardias Viejas de Castilla, Archeros de Borgoña o de la cuchilla, las guardias amarilla o española, tudesca o alemana, la lancilla, la chamberga y los Monteros de Espinosa, que estaban especialmente vinculados a la protección más personal del Rey, y que son la Guardia Real más antigua de Europa, se reorganizan, pasando a formar todos ellos la Guardia de Alabarderos.

Sin embargo, en 1700, al ocupar Felipe V el trono de España, al mismo tiempo que otras instituciones y nombres franceses, tomaron carta de naturaleza los Guardias de Corps, que quedaron organizados en cuerpo por virtud de la Real disposición de 22 de febrero de 1706. En 1814, se nombró oficialmente aquel cuerpo de la Casa Real pero ordinariamente conservó la locución francesa hasta que fue extinguido.

Los soldados del cuerpo de Guardias de Corps tenían la categoría de oficiales. Los cadetes eran capitanes, los exentos y ayudantes, tenientes coroneles, los tenientes eran generales y los capitanes, grandes de España y capitanes generales de ejército. El efectivo total de los Guardias de Corps en un principio, era bastante reducido, pero con el tiempo llegaron a formar seis compañias o brigadas. Una de Italianos, otra de Flamencos y Españoles e incluso existió una de Americanos que estaba formada por hombres de noble estirpe. La Guardia de Corps llego a tener cerca de 1000 efectivo al finalizar el siglo XVII.

El 3 de agosto de 1841, desaparece el Cuerpo pasando sus funciones a ser desempeñadas por los Alabarderos y el escuadrón de la Escolta Real, debido a su dimensión y las prerrogativas que a lo largo del tiempo habían acumulado, sin que estas fueran ganadas en acciones militares o por las cualidades sobresalientes de sus integrantes respecto al resto de cuerpos destinados a la Guardia del Rey.